HUGO CHAVEZ DISPARA Y HUMALA SACA EL CUERPO
HUGO CHAVEZ DISPARA Y HUMALA SACA EL CUERPO.
Otra vez más, como tantas veces en su historial, el presidente venezolano en una actitud absolutamente reprochable hizo un mal uso de su cargo para insultar y lanzar improperios contra quien tiene la "osadía" de pensar distinto a él. Ahora la emprendió contra el candidato a la presidencia del Perú Alan García tildándolo de corrupto y ladrón.
Ayer escuchaba las declaraciones de este “personaje” venezolano cometiendo una clara intromisión en asuntos internos del Perú. Ya no solo proclamaba su apoyo incondicional al candidato Humala sino que arremetía sin vergüenza alguna contra la independencia peruana, llegando hasta la amenaza de retirar a su embajador venezolano si salía elegido Alan García como presidente del Perú.
En unas lamentables declaraciones, que sin duda han dado la vuelta al mundo, Hugo Chavez demuestra su estilo caudillista, autoritario y matonezco del poder. Ya no le basta con hacer y deshacer (sobre todo) en Venezuela, sino que ahora quiere ser el amo y señor de la región colocando en la presidencia peruana a Humala como un satélite del alcance su poder.
Pero al escuchar las declaraciones de Humala, en respuesta a estos agravios de Chavez, sentí vergüenza ajena. En vez de deslindar categóricamente y rechazar los insultos y las intromisiones del presidente venezolano Humala se limitó a una tibia, blandengue y cobarde respuesta diciendo que a él no le correspondía criticar al presidente Chavez y mas bien hizo causa común con este y la emprendió contra García responsabilizándolo como el provocador de las sandeces de Chavez.
Una razón más para rechazar a Humala, ha mostrado su lado más débil, incapaz de contestarle a su admirado padrino Chavez. Así pretende gobernar Humala si sale elegido presidente? Que imagen se llevarían del Perú en el extranjero si este señor nos presidiera ? Cuando no tiene el valor de responder con rechazo y vehemencia los agravios constantes del autoritario Chavez. Caray el cuartel y lo militar se fueron al diablo ni eso pudo mostrar Humala y se guardó el nacionalismo y el patriotismo que dice tener porque más pudo la sumisión y reverencia evidente que ayer mostró y que continuaría si sale electo presidente peruano.
Hugo Chavez, tipo que funge de presidente en Venezuela, ha mostrado una vez más el envilecimiento que causa el poder, concentrando a su favor el congreso, el poder judicial y amordazando a la prensa. Como en su país la oposición le resbala y se rodea de aduladores vive en su propia fantasía creyendo ser una gran gobernante y un líder de América Latina, cosa diametralmente opuesta a lo que la realidad muestra. Respecto a lo primero ha sido y es un pésimo presidente que con políticas populistas ha logrado un milagro económico: la pobreza en Venezuela aumenta mientras sube año a año el precio del petróleo. Y en cuanto a un liderazgo que ansía pero no tiene pretende lograrlo buscando la confrontación baja y callegonezca. Mientras tanto tiempo pierde en sus inacabables monólogos radiales y televisivos y en sus conflictos externos creados por él mismo Venezuela sigue inmersa en la pobreza y la delincuencia es cada día mayor.
Ante tanto trato oprobioso y las permanentes intromisiones del presidente venezolano en los asuntos internos peruanos, violando las cartas de constitución y democrática de los Estados Americanos, se exige una respuesta acode del Ejecutivo peruano. Ya no bastan con seguir mandando más cartas de protesta desde la cancillería. Esto merece una respuesta mayor el Perú debe retirar a su embajador de Venezuela y si esto continua deberá romper sus relaciones con dicho país. Porque aunque no tenemos nada en contra del pueblo venezolano, mas bien lo compadecemos por tener a semejante especimen de presidente, lamentablemente es lo que el Perú debiera hacer para mostar su profundo rechazo a los malos y constantes actos del presidente venezolano. Espero como peruano que la respuesta del gobierno peruano sea contundente porque esta en juego la imagen y la dignidad que todos los peruanos nos merecemos.