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10.12.06

MURIO PINOCHET Y LA IMPUNIDAD PREVALECIÓ


Hace unas pocas horas se dio la noticia: "Murió Augusto Pinochet" y, con la velocidad que actualmente concede la red, la noticia se expandió rápidamente.

"Pinochet fue un estadista, un patriota, un héroe, un visionario que pensó en el bienestar futuro de su país". "Augusto Pinochet sacó a Chile del caos y desorden en el que se encontraba y lo encaminó al progreso económico". Estos son algunos comentarios que sorprendentemente aún circulan en cierto sector de la sociedad chilena, no solo de la derecha partidaria del exdictador sino en parte de la población que quiere ver en Pinochet el salvador de Chile.

"Pinochet fue un criminal, un dictador que arrasó con quienes no pensaban como él, un torturador, un asesino, un terrorista de Estado". Son los comentarios que también, y mayoritariamente, se emiten por los ciudadanos chilenos que entienden el periodo de gobierno del dictador como la peor época que vivió la sociedad chilena.

Y es así que se podían ver en las imágenes televisivas manifestaciones de júbilo y celebración en la Plaza de Armas donde con cánticos, pancartas y banderas miles de chilenos manifiestan su alegría ante el deceso del exdictador. Pero tambien se veian en las afueras del hospital militar algunos simpatizantes de Augusto Pinochet con fotos de este lamentando su pérdida.

Es paradógico que la muerte de Pinochet le haya llegado la misma fecha en que se conmemora el día internacional de los derechos humanos, derechos que el exdictador violó constante y sistemáticamente. Según estimaciones, unas 3.200 personas murieron a manos de agentes del Estado, más de 28.000 opositores fueron torturados, según datos oficiales, y alrededor de 300.000 debieron exiliarse por razones políticas. Recuérdese la Caravana de la muerte, la Operación Cóndor o la Operación Colombo eran algunos de los nombres de las campañas de represión de opositores.

Si bien todavía hay un sector en chile que llora la muerte del exdictador es saludable que sea sólo una minoría. Gente que aún no entiende que la democracia, los derechos humanos y el respeto a las instituciones son vitales para construir y mantener una nación. Gente que cree que el terrorismo de estado fue necesario para hacer de Chile un país en desarrollo.

Lo único que hay que lamentar tras esta noticia es que la justicia no pudo prevalecer, sino la impunidad. Pinochet, escudándose en su senilidad no solo no pago por los graves délitos que cometió sino que muhos procesos judiciales que sentenciarían sus crimenes quedaron sin terminar.

Pero ante todo debo saludar la notable decisión que el gobierno chileno ha tenido al determinar que el exdictador será sepultado sin los honores de un exjefe de Estado. Y aquí no hay animo de revancha ni venganza sino simplemente de consecuencia, de sentido común. ¿Como se podría homenajear a alguien que causó tanto daño a una sociedad? ¿a quién uso el poder usurpado para perseguir, secuestrar, torturar y matar?.¿Para quién la vida de quienes disienten con él no vale nada?. Eso por supuesto no merece homenajes ni nada que se le parezca.