PECADOS POR OMISIÓNEl discurso que Alan García pronunció, luego de asumir el mandato de gobierno, tenía una clara intención de reconciliar a la opinión pública con el Estado y su clase política. Hacia ello apuntaban las medidas de austeridad y las previas críticas a la gestión de Alejandro Toledo. Cuando lo que caracterizó al gobierno anterior fue el dispendio y la frivolidad, y cuando se venía de soportar al peor Congreso de la historia peruana era más que necesario, urgente diría, empezar dando un mensaje de austeridad y de sinceramienro de las remuneraciones de las autoridades elegidas por el pueblo.
Es así que buena parte del discurso se dedicó a la tarea de establecer una nueva relación entre la población y la clase política. De buscar, por lo menos, un acercamiento ante dos instituciones tan desaprobadas – con merecimiento- durante los últimos años, como son el Ejecutivo y el Congreso.
Es cierto que el mensaje inicial buscaba inaugurar una nueva forma de hacer política aunque luego se fue desdibujando en una serie maratónica de medidas puntuales. Pero ese no fue el principal problema sino las grandes ausencias que tuvo el discurso inaugural del presidente García.
Reforma Policial: sabemos que la seguridad es un problema que demanda tomar medidas ya. Pero la solución no pasa solo por colocar más policías, más patrulleros y más presupuesto. Se necesita reformar por completo a una institución donde la corrupción, los malos manejos y la perdida de confianza popular en los oficiales amerita atacar el problema de fondo, de esto nada se dijo. Se intento en el anterior gobierno avanzar con la reforma pero los intereses internos y sobre todo la ausencia de apoyo del presidente Toledo acabo con toda la iniciativa de lograr un verdadero cambio.
Reforma Judicial: el Poder Judicial es la institución más desacreditada para la población peruana, incluso está peor ubicada que el Congreso- lo cual dice ya mucho- en los índices de aprobación. Es sabido por todos que en el Perú la justicia no es igual para todos, si cuentas con poder y/o con dinero la balanza se puede inclinar a tu favor. La incapacidad y sobre todo la corrupción dentro del aparato judicial peruano es alarmante. La jurisprudencia acá no funciona, un juez sentencia una cosa y el otra sentencia lo contrario para un caso idéntico. Los expedientes desparecen y caen en manos del mejor postor. Los juicios duran una eternidad. En fin harta es la problemática de este sector, por eso la convocatoria de García al pedir procesos más expeditivos es apenas un jalón de orejas. Lo que se requiere es una reforma total, impulsada por la autoridad elegida y por la sociedad civil. Aunque se amparan en su autonomía para evitar cualquier cambio, hace falta de voluntad política, y por lo escuchado parece señor García que usted no tiene dicha voluntad de cambio, o me equivoco?
Derechos Humanos: ni una palabra se escuchó en su discurso sobre la Comisión de la Verdad y Reconciliación y sus recomendaciones para reparar a las víctimas de la guerra interna. Ausencia total de compromiso con este sector de la población que sufrió al estar en medio de esta lucha y cuya existencia aun es invisible para muchos de los que detentan el poder.
Reforma Educativa: la situación de la educación en el Perú no es mala ni pésima, es catastrófica. Acá no se salva ni la educación privada, que también es de dudosa calidad, pero la educación pública se encuentra en condiciones deplorables. Más del 90 % de los niños de primaria no entienden lo que leen, son incapaces de resolver problemas elementales de matemática. En secundaria la situación es similar y se termina formando analfabetos funcionales. Es decir la educación escolar en el Perú es la mayor estafa del Estado. La solución no pasa señor García por aumentar una hora a la jornada escolar, ni por dotar de mayor presupesto – que si es necesario- sino por evaluar a los profesores y dejar fuera a los incapaces y sobre todo enfrentar los intereses corporativos del SUTEP, cosa que el ex presidente Toledo prefirió evitar y parece que usted también lo hará, o me equivoco? Claro, los niños no votan no? Por lo tanto no importan.
Reforma Tributaria: La presión tributaria que apenas supera el 14 % del PBI es insuficiente para atender la enormidad de carencias de la población. Los servicios que brinda el Estado peruano son además de mala calidad de deficiente cobertura. Aunque es cierto que en los ultimos años se ha venido recaudando más esto no basta. Ahora, si bien es cierto que hay que aumentar la base tributaria (que aporten más contribuyentes) también es cierto que hay que eliminar las exoneraciones y sobre todo revisar los contratos de estabilidad tributaria con las empresas mineras.
Las regalías no estan siendo pagadas por todos y las sobreganancias mineras por los altos precios de los minerales no estan siendo debidamente gravadas. Pero no hay que "espantar las inversiones" es el argumento para ahora acudir a la generosidad de la grandes mineras para ver si nos "regalan" un aporte voluntario. Mucho se podría avanzar en temas como salud, educación e infraestructura con los recursos provenientes de los altos precios de los minerales. Esperemos que las "voluntades" de las grandes mineras sean tan generosas como su amor por la riqueza.